martes, 14 de octubre de 2014

Diálogo de Criton

Platón, filósofo ateniense nacido hacia el 427 a.C, eligió como forma de expresar su pensamiento el diálogo. Su maestro, Sócrates, fue conocido por el su actividad como orador (puesto que no consideraba la escritura necesaria en su labor), quizás por ello podríamos decir que Platón escogió este tipo de situación comunicativa a modo de homenaje. A lo largo de su vida se distinguen tres periodos distintos basados en un criterio simplemente cronológico:
       1.Diálogos de juventud (de los 28 a los 38 años) (399-389 a.C)              Los diálogos de juventud están dominados por los temas de carácter socrático, y en ellos Platón se mantiene fiel a lo enseñado por Sócrates. Son de esta época también sus viajes a Megara, Cirene, Egipto e Italia.
       2.Diálogos de transición (de los 38 a los 41 años) (389-385 a.C)        En éste período Platón comienza a introducir elementos de su propia cosecha, algunos de los cuales se encaminan hacia la teoría de las Ideas. Tiene lugar en ésta época el primer viaje a Siracusa (Sicilia) a la corte de Dionisio primero y la amistad con Dión, así como su captura como exclavo y posterior huída.
       3.Diálogos de madurez (de los 41 a los 56 años) (386-370 a.C)          En estas obras encontramos ya el pensamiento total de Platón.        

La influencia de Sócrates se dilue y destaca el desarrollo de su propia teoria. Realiza su segundo y tercer viaje a la corte de Dionisio II, quien al poco tiempo rechazó la educación que el filósofo le propuso.
       4. Diálogos críticos y de vejez (de los 56 a los 80 años) (370-347 a.C)  En sus últimas décadas de vida (del 361-347, de los 64 a los 78 años), el Platón que regresa ya no es el mismo, desmoralizado y desconfiado hasta que su propia teoria según el contenido de sus obras.

Para mi entrada voy a comentar el primero de los diálogos de Platón. En él, se refleja no solo la influencia de su maestro sino también el aprecio que le guardaba.
La situación que plantea Platón es un diálogo entre un Sócrates ya encarcelado y pendiente de la llegada del navío que sentencie su muerte, y Criton de Atenas, amigo y discípulo suyo. Criton, como buen compañero que fue y hombre poderoso ofreció su riquezas al filósofo para que pudiera escapar de la cárcel y librarse así de su muerte pero, sin éxito alguno pues este último rechazó cualquier ayuda y aceptó su destino aun si al resto le parecía justo o injusto. He aquí el conflicto filosófico que Platón presenta: ¿Debe aceptar Sócrates su condena cuando es considerada injusta?
Si Platón no estuviera influenciado por la moralidad socrática diría que no y es más el personaje de Criton (representante de su opinión) intenta hacer entrar en razón a Sócrates y convencerle de la nulidad de su castigo.
Personalmente estoy de acuerdo con Sócrates (como ya es habitual) ,toda su vida fue tachado de hipócrita y soberbio pero pese a dichos prejuicios aceptó su condena sin quejarse por ello. El porqué reside en su opinión de moralidad y la expone en un larguísimo último párrafo en el que relata a Criton el sueño de la noche anterior. Dentro de él, participan dos personajes: el mismo filósofo como oyente y la voz de las leyes (un tribunal divino, relacionado con la idea mitológica de la muerte) como “monologista”. El argumento que defiende es, ante todo fiel a su persona, incluso cuando su vida estuvo en la cuerda floja no se retractó como filósofo. Dicho esto, la discusión que le proponen expone que: si decidió quedarme en Atenas y ser su orgulloso ciudadano por propia elección y sin ninguna obligación hacia su persona durante sesenta años, aceptando convivir bajo sus leyes y participando además de la vida pública como ciudadano ¿Por qué razones debería avergonzar ahora todo aquello que defendió con tesón (la justicia y las restantes formas de virtud) por vivir una vida indigna los pocos años que podrían quedarle?

¿No se convertiría en el mismo tipo de persona que criticó durante su vida?¿ De que hubieran servido sus años como virtuoso si en el último esfuerzo lo pierde todo? La primera respuesta sería sí y la segunda: de nada. Por ello, finalmente y siguiendo el consejo de "la voz de las leyes" Sócrates hace “la mejor elección” (o la más correcta, así lo consideró yo) y se dispone a afrontar su muerte dejando a Criton sin más nada que decir.

2 comentarios:

  1. Bien Sandra, buena entrada. Un comentario, nada más. Cuando dices:"¿Debe aceptar Sócrates su condena cuando es considerada injusta? Si Platón no estuviera influenciado por la moralidad socrática diría que no…." . No nos podemos ni imaginar a un Platón no influenciado por Sócrates. Si Platón no estuviera influenciado por Sócrates, no sería el Platón que conocemos, sería otra persona.
    Saludos

    ResponderEliminar
  2. Pero Platón a partir de los diálogos de madurez avanza por si mismo como filósofo desligándose cada vez mas de la tendencia socrática... En un caso hipotético ¿No podría,en su vejez, "recriminarse" el haberle ofrecido ayuda a su maestro porque ahora ya es capaz de: 1 verlo desde un punto mas objetivo y 2 comprender que no era lo correcto de hacer?

    ResponderEliminar