lunes, 11 de mayo de 2015

El Show de Truman

El argumento de la película esconde un trasfondo de desconfianza, un reflejo del clásico: "miedo a ser observado". Truman es objeto de un cruel experimento en el que no se deja nada al azar. Los protagonistas condicionan a Truman mediante miedos y la culpa, es una adaptación de la caverna de Platón, donde Truman es el prisionero de por vida que no conoce otro mundo más que la proyección del mundo real. Relación con el escepticismo local que inaugura la filosofía de Descartes, el cual señala la imposibilidad de conocer algo con absoluta certeza ante la posibilidad de la existencia de un genio maligno.
SINOPSIS
La película gira en torno al programa de televisión de reality  "The Truman Show". Su protagonista, Truman Burbank, está frente a las cámaras aún antes de nacer, aunque no era consciente de este hecho. La vida de Truman es filmada a través de miles de cámaras ocultas, las 24 horas del día y es transmitida en vivo a todo el mundo, permitiendo al productor ejecutivo Christof captar la emoción real de Truman y el comportamiento humano cuando se pone en determinadas situaciones. La ciudad natal de Truman, Seahaven, es un decorado construido bajo una cúpula tan grande que incluye un sol, firmamento y mar artificiales siendo por su tamaño visible desde el espacio; este set está poblado por actores de la serie y del equipo, lo que permite a Christof controlar cada aspecto de la vida de Truman, incluso el clima o  la duración de los días.
Para evitar que Truman descubra su falsa realidad, Christof ha utilizado todos los medios para anular su sentido de exploración y deseo de salir de Seahaven. Sin embargo, pese al control de Christof el personaje no cumple un patrón de comportamiento sino que actúa de forma bastante inesperada.

Durante el trigésimo año de emisión del programa Truman descubre hechos que parecen fuera de lugar, como un foco usado para simular el firmamento nocturno que casi lo golpea al desprenderse (tras lo que rápidamente anuncian por la radio local que fue una luz de aterrizaje que se había desprendido de un avión), una conversación acerca de un "Truman Show" por parte del equipo de filmación en su radio del coche, que describe su viaje matutino al trabajo, el hecho que descubre un patrón repetitivo en el modo en que la gente (los extras) se mueven por la calle y la perturbadora coincidencia que hace que cada vez que algo despierta las sospechas de Truman algún medio de comunicación comunica al instante una noticia que explica "racionalmente" el fenómeno.
Estos acontecimientos hacen que Truman comience a cuestionar su vida, dándose cuenta que gran parte de la ciudad parece girar en torno a él.
Truman, después de pensarlo un momento, dice su famosa muletilla: "Y por si no nos vemos, ¡buenos días, buenas tardes y buenas noches!" y haciendo una reverencia frente a la cámara atraviesa la puerta hacia el mundo real.

VALORACIÓN PERSONAL
En mi opinión el momento más clave de toda la película, es decir, la verdadera reflexión, es el final. Con la huida de Truman el equipo ejecutivo ordena el corte de la emisión, como el espectáculo ha terminado, se muestra a la audiencia del show buscando otro programa que ver. Y así, sin más, la atención popular se distorsiona hacia otro show o reality.
 Con este hecho los directores hacen una clarísima crítica al consumismo medíatico y la influencia externa que ejercen los demás en nosotros. Primero, con cada nuevo espectador vienen muchos más porque si los ciudadanos actuales tenemos un rasgo es, sin lugar a dudas, "la voluntad de encajar" dicho de buenas formas o "la alienación social" dicho de otras, todos seguimos las modas y las costumbres al igual que "Truman" es uno de los shows más populares, y segundo, el consumismo.
A pesar de saber el experimento al que están obligando a Truman, el público lo disfruta. Hoy en día hay muchísimos programas denigrantes y absurdos que aprovechan la falta de conciencia en las personas para entretener a otras, y decir -"va voluntariamente, le están pagando" no soluciona esta cuestión sino que demuestras aún su ridiculez.
Aunque no me gusta nada el actor que da vida a Truman, si recomiendo la película como un método de reflexión, ya que, aunque sea ficción no se aleja tanto de la realidad.

1 comentario:

  1. Bien Sandra, aunque la referencia filosófica más clara no la mencionas: el mito de la caverna.
    Saludos

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